Domingo de Ramos en la Iglesia San José
10/04/22 9:33 | Locales
La celebración del Domingo de Ramos inaugura la semana más santa para el mundo cristiano. En esta semana se acompaña a Jesús en su pasión, en su muerte y en su resurrección. El padre Javier Perelló compartió una homilía con la comunidad de la iglesia San José, y destacó la virtud de la humildad, que es la que demostró Jesús en ese momento:
“La humildad consiste en la conciencia del puesto que ocupamos frente a Dios y frente a los demás. Nos enseña a moderar los deseos que tenemos de gloria, esa gloria humana que siempre buscamos. Nos ayuda a descubrir lo que hay de bueno en nosotros mismo y lo demás. Y todo lo bueno nos viene de Dios, y por lo tanto la humildad permite reconocer el lugar de Dios. Es la madre de las virtudes, porque sin ella no hay otra virtud. Es el fundamento de la caridad y del amor, y se le oponen dos vicios: el egoísmo y la soberbia, de las que podemos ver está lleno el mundo. Jesús, quien entró montado en un burro, nos ha dicho que aprendamos de él a ser mansos y humildes de corazón, para perdonarnos y no agredirnos, y para abrir el oído para que llegue su palabra.
Somos luz y sal de este mundo, y debemos darle sabor a lo que nos pasa. Dios quiere robustecer nuestros brazos y darnos ánimo y fuerza, en un mundo que se nos aparece como desolado, despiadado y cambiante. Hoy la guerra nos asusta, como lo más cruel que puede realizar el hombre. Es un tiempo sacudido por las corrupciones, la impunidad, las agresiones que dividen nuestra hermandad. El tiempo al servicio de la destrucción, olvidando que el día nos lo dio Dios para hacer el bien y establecer la paz. En la sociedad en la que vivía Jesús, también imperaba esta injusticia, y todos se olvidaban de la justicia y de las necesidades de cada hombre y mujer. Quería que su ambición y poder fuera el que prevaleciera.
Hoy todos nosotros, que hemos proclamado a Jesús como Rey, queremos que entre en nuestra ciudad y en nuestro corazón, debemos volver a restaurar esa confianza de hijos, a través de la humildad, sabiendo que al final el señor triunfará”
Notilagos
