Ana Paula Scarpecci, Psicóloga
19/07/22 11:39 | Locales
La cuestión del juego en los niños permite entrar en un mundo simbólico alternativo, en donde se desarrollan como personas y trabajan su pasión. Desde el rol adulto hay que acompañar esto con sinceridad, siendo parte de esto, como un niño más y no con desgano. Es muy interesante plantearlo en relación a las vacaciones de invierno, porque el juego del adulto les sirve como espejo, y es clave para incentivar la imaginación
La psicóloga Ana Paula Scarpecci aportó su mirada profesional con respecto a este tema: “Debemos pensar en el juego no solamente como algo recreativo, sino como una herramienta de potenciación de los recursos que tienen. Hay que pensar en espacios en donde puedan desplegar su imaginación. Los espacios públicos sirven mucho, sobre todo en la interacción con ese otro par. Hay que pensar en un marco para que se desarrolle, y las plazas y los parques resultan muy positivos. Las actividades deben estar pautadas y organizadas por los adultos; no hay que pensar en que todo el día deben estar libres, pero sí hay que dejarle un lugar para que sean ellos mismos, considerando en que están sobreexigidos en muchos sentidos, como por ejemplo los turnos y contratarnos escolares. Esas instancias de ocio hay que permitírselas, también para descansar y recuperarse”
La crianza se da en una comunidad, de manera que todos los adultos ponen algo para que crezca sanamente. En este sentido, debe pensarse que está bien ser exigente siempre que trabaje siempre dentro de las posibilidades del chico o chica: “Debemos pensar qué mundo queremos para nuestros chicos y chicas. Los valores hoy son otros, y hay que considerar qué recursos para quién. Hay que considerar las edades y los intereses, qué es importante legarles y qué formación para el mundo futuro”
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