Ana Paula Scarpecci, Psicóloga

Ana Paula Scarpecci, Psicóloga

La comunicación que hace a una vida saludable

Los motivos de la importancia de cultivar un diálogo sano

05/11/22 13:39 | Locales

Hay frases en la comunicación que se repiten constantemente. Un ejemplo puede ser la que sostiene que hay que escuchar a los niños. El problema es cuando se produce la escucha, pero no hay respuesta ni devolución. No hay diálogo. Entonces, transmitimos solamente y quedamos en el lugar de la impotencia, porque la otra parte no recibe devolución. En un mundo en el que todos oyen y nadie escucha, se vuelve necesario tener un rol activo para poder dar una respuesta, una vuelta, reciprocidad o correspondencia.

La psicóloga Ana Paula Scarpecci explicó por qué recomienda fomentar el diálogo: “Todos tenemos un recurso para ser parte activa. No es necesario ser un gran hablador o un profesional. A veces es necesario un abrazo, una mirada o algo que demuestre contención. Si escuchamos a los niños, por ejemplo, pero ante eso no hacemos nada, no tiene sentido. Se pierde el valor de la comunicación. Es importante hacerlo, pero hay que darle la vuelta para pensar en qué sugerimos cuando hablamos de escuchar a los niños. La disparidad no es buena para la comunicación, aunque es parte de la relación y vinculación, porque hay cosas que no se pueden equiparar, como la edad, jerarquía y demás. No puede haber una igualdad total, pero hay que hacer una devolución a su lugar de niño, pero cumplir con una respuesta”

Todos los vínculos son difíciles, sobre todo en la época actual, en donde se tiende al individualismo, al éxito personal y a la desvinculación. El diálogo debe pensarse como la herramienta más eficaz para solucionar los conflictos, poniendo en el plano simbólico lo que sucede: “Hay que reivindicarlo y aceitarlo, porque es lo que nos puede proporcionar un cambio a futuro. Hay que replantearse desde donde uno habla y desde donde escucha. No es solo oír, hay que decir. Las dos cosas. Algunos se jactan de ser frontales, pero termina transformándose en algo agresivo. Todo debe ser saludable. Hoy esa frontalidad tiene un valor negativo, porque si se va a agredir, hay que replantearse hacerlo, porque hay que pensar si el otro quiere escuchar una barbaridad”

Replantearse el lugar de la escucha y del hablar. ¿Qué se dice y qué no? ¿Cómo se responde? Todo nunca puede ser dicho, sobre todo a un chico. Hay que pensar en cómo decírselo: “En todos los vínculos puede haber cuestiones no saludables. A veces uno no mide lo que dice en discusiones acaloradas, pero esto tiene que ver con el otro también. Siempre están los que quieren resolver las cosas de manera más racional, y otros no. Mucho se arrastra de la infancia, y tienen sus maneras de salir, en lugar de repensar y volver a plantearse como amigarse con las emociones y cómo atravesarlas, porque son inevitables y no se pueden controlar. Pero el resto del mundo no tiene la culpa”

Notilagos

También te puede interesar...

MÁS LEÍDAS

  1. La escuela de boxeo del Club Atlético Libertad participó en un lindo festivalIr a la noticiaCompartir en Facebok

  2. El Vivero 'Estación Verde': cultivo y crecimiento continúo Ir a la noticiaCompartir en Facebok

  3. Jornada muy especial por el Día del libro en General LagosIr a la noticiaCompartir en Facebok

SEGUINOS EN FACEBOOK