Esteban Fernández
17/02/23 13:34 | Locales
Esteban Fernández es un vecino de la localidad que realizó una denuncia pública, luego de que fuera despedido después de lesionarse en su trabajo, en el Frigorífico Ciribe, en donde trabaja desde hace cinco años.
El problema se inicia cuando Esteban se tomó una licencia necesaria para operarse de las hernias, debido a los problemas que el mismo trabajo en la empresa le ha generado. También espera un tratamiento de los hombros: “Fue bastante prolongada, pero por necesidad. No me llegó telegrama de despido, pero tampoco me han dejado entrar a trabajar. Sin explicaciones. Me accidenté en el mismo trabajo. Estoy operado de dos hernias, tengo problemas en los huesos del hombro, y tendinitis en la muñeca. Estoy renegando mucho, no puedo hacer fuerza. Me reacomodaron dentro de la fábrica, ayudando a chicos del lugar, pero luego me mandaron a seguir bajando carne. Yo no puedo hacer más fuerza. Me volví a lastimar, y resentí lo de la operación, que fue pro dos hernias, teniendo que volver al hospital. Al parecer, no me pueden reasignar a otro puesto, y yo lo que quiero es trabajar. No me interesa estar sentado en una oficina, porque siempre trabajé”, explicó.
Esteban se reincorporó a trabajar como cualquier otro día. Pero el día viernes se enfermó, por lo cual se fue a su casa. Le mandaron un médico laboral, para ver si estaba en su casa, y fue así. El día lunes se presentó a trabajar con el certificado normalmente. Pero al día martes, ya había un sereno con orden de no dejarlo ingresar: “Tengo cartas documento, hice denuncias en la policía. Mando telegramas, y me responden que no me estoy presentando a trabajar, y que me niegan lo que les envío. Los serenos no me dejan ingresar, por orden del jefe de la oficina. Sin otra explicación. Cumplen órdenes, pero no me dan respuestas. Entiendo que en toda empresa es difícil pagarle a alguien con licencia, por no hacer nada.”
Según explicó, los directivos siempre le han afirmado a los empleados que ellos son como su familia, y que somos parte de la empresa: “Todo muy lindo, pero son ellos los que me firman los telegramas, negándome que me impiden la entrada. Todo está en manos de los abogados. Tengo vecinos que se han tomado la molestia de acompañarme a la madrugada, para que sean testigos y filmen que no me dejan ingresar”
Una situación estresante, para alguien que trabaja en la empresa desde hace cinco años, dejando su salud y su fuerza de trabajo cada día: “Todo lastimado, golpeado y cansado, y aun así, trabajaba a la par de mis compañeros. No me dan una respuesta. Por el contrario, no me dejan ingresar, pero a la vez me dicen que soy yo el que no se presenta a trabajar. Fui a la oficina a tratar de hablar con ellos, pero no me reciben. Lo mandan al jefe de la oficina. Me dicen que son órdenes de arriba. Ayer me contestó después de tanto tiempo, diciéndome que no me presente a trabajar, porque no pertenezco más a la empresa. Hablo con mi abogado, y me dice que por más que me diga lo que me diga, que me tengo que presentar igual, porque esto no es de palabra. Estoy tratando se seguir peleando. No soy una persona a la que le gusta hacer quilombos, pero no sé qué más hacer”
Esteban solamente quiere trabajar. Y si no es posible, al menos exige una respuesta clara y justa: “Yo sólo quiero recuperar mi puesto de trabajo. Eso es todo. No pido plata. Me están tirando a la basura como cualquier cosa. Tengo familia y criaturas. De verdad no sé qué hacer”, finalizó preocupado, y consciente de que ahora será muy difícil recuperar el trabajo debido, principalmente, a su cuerpo golpeado y lastimado por el arduo trabajo.
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