Jose Maciel
05/03/23 9:09 | Locales
'La transfiguración se propone fijar en el corazón de los apóstoles, el escándalo de la cruz. Ellos tenían todas las imágenideas puestas en un Mesías ganador, triunfador. Y se quedaban con eso. Lo que le debía pasar a Jesús era una condena demasiado grande para ellos, teniendo en cuenta todo lo que había hecho.
También nos presenta la idea del Padre y la Santísima Trinidad. A través de esto, pensar en el tiempo para escuchar más al señor. No es cuestión de cantidad, sino de calidad. Escuchar mucho más a Dios, en sinfonía para saber que debemos hacer hoy, en materia de caridad y de Fe. Lo que está en nuestras manos: el presente, haciendo funcionar la gracia y la fuerza del señor.
Escucharlo. Mirar al otro, y entender lo que necesita y nos quiere decir. Dios en el otro.
No tener miedo, porque a pesar de todo lo oscuro que nos pueda suceder, la última palabra la tiene Dios. Eso es lo que hay que tener en cuenta.
Al escuchar al señor, hay que dejar lo que nos molesta, y con los demás. Obstáculos que nos ponemos. Cuando nos toca el sufrimiento sabemos que no es castigo, sino permision, para que esto se pueda ofrecer por los demás, aprendiendo que ignoramos qué tanto puede sufrir el otro, y qué problemas puede tener. Los seres humanos queremos que todo salga perfecto, impecable. Cuando chocamos con esto, nos sentimos mal, y es ahí en donde tenemos que buscar a Dios para comprender.
Vivamos esta cuaresma de esta manera: escuchar a Dios, y no temer.
Padre José Maciel