Marlene exhibiendo con orgullo su bandera
28/06/23 11:14 | Locales
En General Lagos hay muchos héroes y valientes, y muchos luchadores que desafían las circunstancias exteriores y, derribando prejuicios, conquistan sueños. Este es el caso de Marlene Luisana, mejor conocida en la historia local como “La Pocha”, que dando un paso histórico, obtuvo su nuevo DNI acorde a su autopercepción de género, logrando que su identidad sea la que siempre quiso. Ella comparte su historia de vida, en un exclusivo e interesantísimo testimonio:
“Nací en el año 1981. En la adolescencia comencé a darme cuenta claramente de que me llamaban la atención los chicos, pero me costaba mucho aceptarlo. Me llevó mucho tiempo. Hoy soy Marlene, y en otro entonces era Gustavo. Antes de la Pandemia decidí camiar mi nombre y obtener un nuevo DNI. Salíamos, y en ese momento me pedían mi nombre. A mí no me gustaba el nombre Gustavo, me desagradaba utilizarlo porque no me identificaba con él. No me quedaba otra que decir la Pocha, que es como todos siempre me conocieron en el pueblo. A raíz de eso, me hizo un click, y entonces tomé la decisión, y ahí es cuando me pude aceptar, porque necesitaba algo que me identifique. Ahí cambió todo para mí, y estallé de felicidad”
Marlene nació en Jujuy, y luego estuvo en General Lagos desde su que era adolescente. Siempre tuvo mucha aceptación entre la comunidad, que lo aceptó tal cuál es: “Nunca sufrí discriminación. Esto me sorprendió porque era un pueblo chico y era otra época. De cualquier manera, siempre fui muy respetuoso con todos, y creo que esto me ayudó mucho”
Marlene siempre se encaminó valientemente tras su sueño, se mostró en todo momento tal cual es, desde el comienzo, y afrontó toda la realidad con mucha valentía y orgullo, sin esconderse, mostrándose alegre y sin prejuicios. Actualmente, además de definir su nombre con una nueva identidad y DNI, también mantiene el objetivo de cambiar físicamente: “Decidí también cambiar lo físico, iniciando con un tratamiento de hormonas, desde hace cuatro meses, y cada vez que iba a la consulta volvía bajoneada, porque es largo y había que hacerse muchos análisis. Hasta que se me dio”
Hace un año que la Pocha es Marlene. Un nombre nuevo, una vida nueva, y un cambio en la manera de relacionarse con la gente. Ahora, camina hacia nuevas metas, nuevos desafíos y nuevos sueños a cumplir.: “Tengo también el objetivo de operarme, de cambiar mi sexo. No lo voy a hacer ahora, pero está dentro de mis planes. Hoy hay muchos que se reprimen y la pasan mal por el miedo, pero para liberarse hay que soltarse y mostrarse tal cual es uno, sin complicaciones. Hoy si mi ejemplo sirve para alguien, está buenísimo, aunque no me considero una referente”
Cuando ella se decidió a realizar este gran cambio en su vida, varias fueron las respuestas entre las personas de sus círculos más estrechos: “Mucha gente cercana me apoyó, pero no mi familia. En realidad ni siquiera se los comenté, porque en su momento surgieron algunos conflictos respecto a como yo era. Nunca me apoyaron, pero eso no me detuvo. Gracias a la compañía de algunas personas se me hizo muchos más fácil y llevadero todo esto y lo hicieron posible. Quiero agradecerles a todos ellos. Ellos saben quienes son y no tiene precio lo que me han ayudado”
El nombre elegido para este cambio trascendental es Marlene, pero en un principio ella había pensado en otro: “En principio iba a ser Luisana. Me encanta ese nombre. Marlene me sonaba mucho y me saltaba mucho en las redes. Cuando llego a hacer el trámite, automáticamente se me vino a la cabeza, pero no estaba contemplado. Cuando la jueza me pregunta, se lo dije y me dijo que le encantaba. Lo decidí en el momento, a la hora de llenar un formulario”, finalizó narrando.
A Marlene le costó muchos años aceptarse. Siempre hacia delante, nunca se detuvo. Hoy ya cumplió su sueño de ser oficialmente una mujer trans, y es un final feliz para ella. Su vida está plena, porque la sociedad lo felicita por este cambio y lo celebra, aunque, como ella reconoció, sigue siendo la Pocha, que es el resultado de una denominación que fijó la costumbre local, y que no conserva ningún sentido despectivo sino que, por el contrario, siempre será una forma cariñosa de llamarla. Muchas felicitaciones y a seguir peleando para cumplir sueños, con mucho orgullo.
Notilagos
