Alejandra Pellegrini, la víctima
25/10/23 9:48 | Locales
Robo en el CIC de General Lagos. La víctima es la doctora Alejandra Pellegrini, a quien todos ya conocen como una profesional con trayectoria que se caracteriza por atender con la mejor onda, de manera sumamente amable y respetuosa. Ella se dio cuenta del hecho aproximadamente a las 11:00 Hs. cuando se dirigió a buscar su cartera porque necesitaba algo:
“Veía que algo no andaba bien. Me dí cuenta de que faltaba la billetera porque era grande, aunque hermosa. En un primer momento pensé en que había un error, y que la habría dejado en mi casa. Pero luego no la encontré. Mis compañeros me dijeron que revisara el Home Banking, y cuando miro encuentro que ya habían gastado una compra por trece mil pesos, otra de sesenta y cuatro mil setecientos. Y me faltó todo el dinero en efectivo que era bastante. Estamos hablando de más de ochenta mil pesos en efectivo. Además los documentos, incluido el carnet de conductor, de médico pediatra, el de donación de órganos, de la obra social de Iapos y otras cosas de valor afectivo Gracias a Dios no tengo documentos”
Le llevaron muchísimo dinero para cualquiera. Ella no pudo disimular la angustia, y alguien que estaba haciendo una práctica final lo percibió: “Me dijo qué tranquila que estaba. Le llamaba la atención mi estado. Lloré a la noche, pero los trámites los hice tranquila durante el día. Pero pensaba en qué para qué iba a salir corriendo o romper algo, si no iba a ganar nada”
La gran pregunta que cualquiera se puede hacer en este caso es: ¿en dónde están las cámaras? Es la pregunta del millón: “Aún no hay nada. De los pacientes que entraron cuando atendí yo, eran pacientes que uno ve siempre. Gente divina a la que quiero mucho. No me lo esperaría. En ese caso se le sumaría el dolor de la traición. Nadie estuvo solo acá adentro, salvo cuando me fui a admisión, y alguien entró de disparada”
Alejandra le da lo mejor a la comunidad. Todo el mundo sabe de su afecto de su cariño, pasión y dedicación a la hora de atender a todos. Siempre se ha portado sumamente bien con todo el mundo, teniendo en cuenta la miseria que cobra un trabajador médico en estos días: “Mucho me lo dejaron mis padres, pero acá no gano fortuna. Vengo a trabajar con el corazón. Tengo pacientes que me quieren un montón. Es lo único que me llevo. La gente buena, la familia, los amigos y lo poco que uno pueda viajar. Son esas cosas que te llenan el alma, gracias a Dios. Yo siempre traté de ser buena persona y buena profesional, que fue lo que me enseñaron desde que nací”
Alejandra encontró mucha contención de parte de sus compañeros y de muchos vecinos que se solidarizaron con ella, preguntándole qué necesitaba y dándole aliento. De cualquier manera, ella, con la cabeza en alto, nuevamente se levantó y se presentó a trabajar con la mejor de las ondas, como cada día de trabajo suyo: “Uno viene con la mejor onda, dándolo todo, incluso pagando cosas de su bolsillo. Así que la confianza tendrá que cambiar a partir de ahora. No sospecho de nadie, pero los pacientes”
Mucho dinero de una trabajadora, y elementos de mucho valor afectivo. Del esfuerzo diario, honesto: “me dijeron que no venga a trabajar. De cualquier manera vine igual. Yo seguiré trabajando, con mi profesión y con la gente. Es un trago amargo, pero seguimos adelante. Todos los días se aprende algo nuevo. Siempre con la mejor. Más no le puedo pedir a la vida.”
Notilagos