Todo un desafío en tiempos difíciles
16/12/23 19:03 | Locales
'En la segunda lectura, parece que le habla a los cristianos de nuestra sociedad, y como si le hablara a los argentinos. Nos dice que estemos siempre alegres, que recemos y que demos gracias sin cesar a Dios por todo. Que examinemos todo, que nos quedemos con lo bueno y que nos cuidemos del mal entidad sus formas. Esto es muy importante en el momento en el que estamos viviendo como sociedad.
Estar siempre alegres. Podemos preguntarnos cómo podemos estar alegres con todas las noticias, que son como lluvia de desgracias. San Pablo recomienda estar alegres porque tenemos una certeza: el amor de Dios sobre cada una de las personas, sobre cada uno de nosotros. Además de la certeza del amor de Dios, está la esperanza del encuentro definitivo con Dios. Una certeza y una esperanza.
Cuando perdemos de vista esto y nos olvidamos, comienzan a entrar otras noticias en primer lugar. Empezamos a sentirnos abrumados con tanta cosa que pasa afuera, sumado a lo que personalmente me ocurre. Cualquier adulto tiene problemas que lo amargan en su vida.
Lo primero es sabernos amados, con el ejercicioo y la experiencia de pensarnos como las personas que están enamoradas. Una relación que transforma, que cambia. Así es Dios con nosotros. Nos ama y nos da ese amor. El problema es lo que hacemos con la parte que nos toca a nosotros: ¿Nosotros nos entregamos por completo? ¿nos jugamos por eso? ¿o nos quedamos con todas las noticias que tenemos negativos?
La certeza del amor de Dios y la esperanza del encuentro definitivo con Dios. El tiempo del adviento es el tiempo de la preparación para ese encuentro pleno, que nadie sabe cuándo se dará'
Notilagos
