Lento trámite. Dos años después de la muerte de su padre, José espera.

Lento trámite. Dos años después de la muerte de su padre, José espera.

Piden 'condena ejemplar' por una muerte en la ruta

Se trata de un hombre que falleció embestido de frente en 2012 por una camioneta. Su hijo pide celeridad a la Justicia.

28/06/14 13:21 | Zonales

Fulgencio Pascual Ferretti había partido con su Volkswagen Gol desde la localidad santafesina de Arteaga junto a su nieta y una amiga para trasladarlas a Cruz Alta porque tenían clase de catequesis. Pero a unos pocos kilómetros de la vecina comunidad cordobesa chocaron de frente contra una camioneta Ford F-100 que imprudentemente intentó sobrepasar un par de camiones en una zona de curva de la ruta provincial Nº 92 y a causa del impacto el hombre, quien tenía 72 años, murió mientras que sus pequeñas acompañantes salvaron sus vidas de milagro aunque sufrieron lesiones que le dejaron secuelas.

A más de dos años de ese dramático accidente, ocurrido el 21 de abril de 2012, el hijo de la víctima, José María Ferretti, reclama celeridad a la Justicia, y cuestiona a la compañía de seguro porque 'hasta ahora en vez de responder por los daños ocasionados se mostró totalmente indiferente y tuvimos que afrontar todos los gastos'.

La causa se instruyó inicialmente en el juzgado correccional de Casilda, a cargo de Carlos Pareto, quien en octubre de 2013 procesó al conductor de la camioneta, Adelqui Capponi y oriundo de Cruz Alta, por los delitos de homicidio culposo, lesiones graves y leves culposas en concurso ideal. La causa fue elevada a requerimiento de la Fiscalía al Juzgado Correccional de Villa Constitución para su correspondiente juicio y sentencia aún sin definición.

'Fue un asesinato'. Ferretti sostiene que la muerte de su padre fue 'literalmente un asesinato porque el hombre que manejaba la camioneta no podía ignorar el desastre que podría ocasionar al irresponsablemente intentar pasar a dos camiones en una curva cerrada cuya zona estaba señalizada con doble ralla amarilla, además de haber guardarrail a ambos costados de la ruta'.

Ferretti no comprende las razones por las cuales aún el caso 'continúa irresuelto pese a pasar tanto tiempo' y se mostró 'indignado' que el dueño de la camioneta 'siga, en virtud del principio de inocencia, teniendo licencia y manejando impunemente como si nada hubiese pasado, lo cual resulta tan doloroso como reprochable'.

José María, quien reside en Arteaga y asegura haber sido 'muy unido' a su padre más aún tras la muerte de su madre Haydeé Angela Bertetti, también se mostró molesto porque el imputado 'ni siquiera tuvo la grandeza de pedir disculpas mientras yo convivo con la angustia de no tener más a mi viejo'.

Hacerse cargo. Asimismo, denunció a la aseguradora donde tenía cobertura el propietario de la camioneta, porque 'desde abril de 2012 no recibí ninguna ayuda económica para hacer frente a las gastos por la muerte de mi padre y las lesiones que sufrieron mi hija Melani y su amiga Micaela', quienes cuando ocurrió el accidente tenían 12 años.

Y en esa misma línea, puntualizó que 'gracias al dinero de amigos y deudas que contraje pude pagar el sepelio y solventar las altos costos sanatoriales, estudios médicos, y prácticas de rehabilitación, entre otras erogaciones' que debió afrontar.

Aunque aclaró que la aseguradora hizo recientemente un ofrecimiento económico, lo calificó de 'risueño'. Y opinó que esa empresa 'prefiere litigar un proceso judicial sin razón alguna mientras que sabe que el dinero, que es prioridad de las víctimas, es más productivo ponerlo a tasas encumbradas en su caja mutual para con la renta financiera soportar las pérdidas de su resultado técnico, lo que ocurre porque la Justicia se lo permite al no dar respuesta pese a los pedidos para condenar a una aseguradora a abonar el doble de tasa de interés cuando se litiga sin fundamento'.

Sentencia 'justa'. Asimismo, y pese a cuestionar la 'lentitud de la Justicia', dijo esperar una 'sentencia justa y con condenas ejemplares'. Ferretti finalmente se quejó porque 'todavía no hubo condena para que los responsables de lo sucedido paguen sus responsabilidad penales y civiles mientras yo todavía tengo que soportar haber sido imputado por haber agredido al conductor del rodado, lo cual fue una reacción emocional ya que cuando llegué al lugar del hecho se mostró indiferente mientras hablaba tranquilamente con su celular y yo no podía salir del shock que me causó haber encontrado a mi padre muerto dentro de su auto y a las nenas heridas y gritando de desesperación'.

La Capital

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