La batalla más díficil es contra las adicciones
19/09/13 11:12 | Locales
REMAR (Rehabilitación de Marginados) es una ONG Cristiana que pretende la reinserción de personas marginadas, por distintos motivos, al entramado social. Tiene sede en todo el mundo y también aquí, en General Lagos.
Alberga a mujeres, niños, jóvenes, adultos y ancianos de forma gratuita. En nuestra localidad todos los internos son adolescentes varones y adultos.
Los internos son procedentes de lugares distantes de este centro porque, la primera etapa del proceso de recuperación, consiste en el aislamiento del entorno que los enfermó. Luego se los deriva a otros centros ubicados en distintos puntos del país donde se someten a otras instancias de recuperación.
El denominador común es que todos poseen una historia de vida que conmueve, sorprende y a pesar de ello conservan la esperanza de recuperar la dignidad.
Durante la estadía, los internos, cumplen con distintas funciones relacionadas al cultivo, la crianza de animales y el aprendizaje de diferentes oficios. En REMAR están prohibidas las discusiones y peleas y los que transgreden las reglas son sancionados, hay mucha disciplina y la fe en Dios ocupa un lugar fundamental en el tratamiento.
Los internos dependen en gran medida de la colaboración de los vecinos de la comunidad y con lo que recaudan de lo que ellos mismos elaboran, una de sus fuentes de ingresos es la venta de pan casero que ofrecen en el pueblo y en la ciudad de Arroyo Seco.
La cifra de residentes fluctúa porque a medida que las personas se recuperan son derivadas a otros centros para continuar el proceso de rehabilitación. El primer paso es la internación y reconocer su propia situación, aislarse de todo, inclusive de los familiares y amistades, luego empezar a insertarse en la comunidad, eso sucede en General Lagos, el siguiente paso en el proceso de recuperación se da en otros centros.
Si bien es evidente que el prejuicio es un gran obstáculo, en el momento en el que deben vincularse con la comunidad de la que forman parte momentáneamente, ellos mismos son los que resaltan que la gente colabora con gusto.
Todos los que deseen colaborar lo pueden hacer comprando sus productos de panificación o donando alimentos no perecederos, artículos de aseo personal, muebles, calzado y abrigo, eso en cuanto a lo material porque una gran forma de ayudarlos es no prejuzgándolos.
Las puertas están abiertas a todos los que padecen problemas a causa de las adicciones a las drogas o al alcohol o a los que viven en la calle, en situación de desamparo o son víctimas de la violencia familiar. En Rosario hay lugares adaptados para ancianos, niños, mujeres y matrimonios. El número de contacto es 0341 448 2583 y la oficina de atención en la ciudad de Rosario es Buenos Aires 1415
Andrés Vallasciani