Roberto Serraiocco
29/04/16 13:13 | Zonales
En el dia de ayer mediadas las 21:50hs, Roberto Serraiocco dejó su Renault Kangoo modelo 2008 en un estacionamiento de calle Belgrano al 900 y tras cerrar, se encontró con la presencia de dos delincuentes que a punta de revolver lo obligaron a entregar las llaves del vehículo y subirse al mismo en la parte trasera. Uno de los malvivientes subió del lado del conductor, y el restante (mientras seguía apuntando a Roberto en la costilla derecha) del sector del acompañante. Inmediatamente pusieron en marcha la chata y se dirigieron hacia la zona del acceso. 'Eran dos personas jóvenes, entre 20 y 25 años, a cara descubierta y armados. Me gritaban amenazándome que me iban a matar si elevaba la vista y los miraba', indicó la víctima.
Mientras iban camino hacia Buenos Aires por el autopista, Roberto se encontraba boca abajo sin elevar la vista, mientras era apuntado por uno de los ladrones: 'me decían que no mire o me mataban, me metían las manos en los bolsillos donde me sacaron aproximadamente $2.000 y me pedían el celular pero yo no lo llevaba. Hablaban entre ellos y yo pedí que me suelten, pero no lo hicieron y siguieron rumbo conmigo arriba', cuenta Roberto con la voz entrecortada.
Al detenerse, Roberto sintió el mayor miedo desde que comenzó esta odisea: 'se tiraron a la banquina, pararon la chata y me dijeron que me baje y camine en sentido hacia donde estábamos viajando, o sea hacia Buenos Aires, pero yo no sabía dónde estaba porque primero pensé que estábamos cerca de Rosario. Camine sin darme vuelta con el miedo de sentir la bala en la espalda, mientras escuchaba el silencio y la Kangoo no arrancaba; hasta que en un momento veo que arrancaron y se perdieron entre la noche. No había nada, estaba todo muy obscuro y hacía frío', esbozó.
Tras varias horas caminando, Roberto encontró un poste de S.O.S y accionó el botón de ayuda: 'apreté y hablé con una chica que hasta me preguntó el nombre. Vino personal de Cincovial y policía de Villa Constitución que me trataron de manera excelente y me trajeron a Arroyo Seco.
A Roberto no le interesa la chata, solo su salud. Sufre problemas cardíacos y agradece estar vivo: 'volví a nacer', decretó. Tras 4 horas de odisea, Serraiocco está vivo y nuevamente con su familia, que 'estuvieron desesperado, porque me fui por 5 minutos y no llegaba más', sentenció.
Canal 2 / Info Arroyo