Recuerdos imborrables
07/11/13 12:45 | Zonales
En el texto que dirigió a Claudia escribió como si lo hiciera Santiago
'Hola Má:
Hace un tiempo que no me ves ni podemos hablar, pero yo puedo escucharte y también te veo. Es más, hasta puedo tocarte y acariciarte, puedo sentir la tristeza de tu corazón y también la fuerza que gracias a Maca hoy tenés. A ella también puedo verla, la acompaño a... todos lados.
Siempre tuvimos una conexión muy especial, siempre pensamos el uno en el otro de manera incondicional. Sólo vos y yo lo sabemos, porque esas cosas no pueden explicarse, se sienten.
Quiero decirte que en todas las cosas que hacen, estoy. Hago lo mismo que ustedes, como si hubiera pasado a vivir sus vidas, la tuya, la de Maca y la de papá. Si ustedes sonríen, yo también; si ustedes lloran, yo también; si se abrazan, los abrazo; si se pelean, ahí estoy también; si caminan, viajan, duermen, sufren, se divierten, si charlan con mis amigos; si pasan un rato con Pame, lo vivo también; cuando ven partidos de Douglas, Comu o Independiente ahí estoy alentando, en todo los estoy acompañando y vivo a través de ustedes.
Quiero que sepas también que fui muy feliz, que agradezco que seas mi mamá, agradezco tu amor eterno y tu dedicación, agradezco que hayas elegido a papá y me hayan educado con tantos valores, agradezco el regalo más lindo que me hicieron: Maca, mi garrapata, mi hermana, mi cómplice, mi mejor contrincante a la hora de las peleas. Sin ella mi vida no hubiera sido la misma. Por eso te pido Má, que la cuides, que la beses y abraces todos los días, así yo puedo hacerlo también.
Estoy tan contento por tu nuevo trabajo! Si, te lo mandé yo para que puedas relajar unas horitas tu cabeza y de paso darte una mano para que no les falte nada, ni tengas que preocuparte por los gastos.
Acá con los abuelos y tanta gente que me voy encontrando, nos pasamos el día hablando de ustedes, la Gordis sigue igual con sus ocurrencias y su buen humor, el abuelo Titín te mira cada vez que te acercás a las jaulas y se asombra de lo bien que cuidás a los pájaros jaja. La abuela Elvia me llena de amor también y siempre tiene algo rico para convidarnos. Me parece increíble estar acá con ellos, nunca pensé que los volvería a ver tan pronto, pero entre todos nos cuidamos, como hacen ustedes, hasta que podamos volver a reunirnos.
Má no aflojes, vos me enseñaste a luchar, siempre salimos adelante y estoy orgulloso de vos. Sé que hasta que no se haga justicia no vas a parar, te conozco y te agradezco por eso, pero permitite descansar, recuperar fuerzas y seguí, yo veo todo y puedo entenderte. Te empujo cada día y te levanto cada vez que tus piernas no aguantan el peso de la mochila que hoy te toca cargar. Siempre vamos a estar juntos, te lo prometo.
Cada noche me acuesto al lado tuyo, te agarro fuerte de la mano y te miro hasta que te dormís. Cuido tus sueños, cada latido de tu corazón hace que me sienta vivo. Sos tan linda, Má. Gracias una vez más por todo lo que me diste y todo lo que seguís haciendo por mí. Cuando te sientas triste hablame, seguí contándome tus cosas, todo lo que te pasa, estoy escuchándote y guiándote. Abrazalo al “momo” y coman un asadito como hacíamos siempre, eso me hace feliz, verlos juntos, unidos y en paz.
Yo vivo en ustedes, lo sabés. Estoy donde ustedes están, como la última vez que nos vimos, con la camiseta del Rojo, perfumado como a mi me gusta, siempre con un vaso de fernet a mano y esperando el veranito para volver a la quinta, más ahora que lleva mi nombre! Jaja Como me gusta estar ahí, al aire libre, tomando sol, descansando.
Hablando de la camiseta del Rojo, que increíble fue ver mi foto en la pantalla gigante, que grande sos Claudita, ves que es como yo digo? Sos la mejor. Gracias Má, muchas gracias. Sentí la misma emoción y alegría que vos al escuchar ese silencio en mi nombre. Cuantas cosas increíbles han pasado en 2 meses!
Muchas de estas cosas pude decirtelas y otras quiero hacertelas saber ahora, desde tu corazón, si, acá estoy. Bien aferrado, porque no hay lugar donde pueda sentirme más amado, y porque estando acá me aseguro de que siga latiendo con la misma fuerza de siempre. Si por momentos sentís que no podés más, ahí voy a estar haciendo fuerza por vos, no te voy a dejar caer.
Aunque quisiera que todo fuera como antes, hoy necesito que te quedes con Maca, que cuando quieras llamarme la llames a ella, cuando quieras abrazarme la abraces a ella, y cuando se peleen ahí voy a estar para reírme. Acordate que nuestros corazones laten a la par, para siempre.
Bueno Má, te dejo el más infinito de los besos, pero acá sigo, al lado tuyo amandote tanto que no puedo decirlo con palabras, pero todos los días te lo hago saber, buscame en las pequeñas cosas que ahí voy a estar mandandote mi abrazo. Buscame en Rocco, Lola y Manchi, mimalos mucho. No te olvides de los pajaritos, a ellos también los sigo disfrutando, no me canso de mirarlos.
Y por mi carrera no te preocupes, fui a rendir con mis compañeros y tengo mi título! Pero el mejor diploma me lo dieron ustedes, en la carrera de la vida. Me recibí de hermano, de hijo, de primo, de sobrino, de amigo y novio. Gracias por haber sido, junto con papá, mis mejores profesores!
Ahora si, me voy despidiendo, mirandote como lees y sabiendo todo lo que se te está pasando por la cabeza, las imágenes y lo que me dirías en este momento. ¡Te amo, má! ¡Te amo tanto!
Y como dice mi canción: Seré tu estrella, seré tu guía...
Tu querido Santi'.
La Capital
