GM, Alvear
01/03/17 8:03 | Zonales
La automotriz General Motors (GM) decidió suspender a unos 350 trabajadores de su planta de General Alvear por el término de nueve meses a partir de la semana próxima y el destino de esos operarios dependerá 'de la esperada reactivación de la economía'. Así lo confirmó ayer el secretario general del Sindicato de Mecánicos y Afines (Smata) Rosario, Marcelo Barros, quien aclaró que los términos y condiciones de esta medida 'todavía se están definiendo' en el marco de una negociación con la empresa que transcurrirá durante estos días. Desde la compañía confirmaron ayer a ♫La□Capital de la existencia de estas tratativas con el sindicato, aunque aclararon que 'aún no están concluidas', pero desistieron de dar mayores precisiones.
La recesión en Brasil, principal destino de las exportaciones argentinas, es la causa fundamental de la crítica situación que pone en jaque no sólo a la planta ubicada en el Gran Rosario sino a otras como Volkswagen, que ayer anunció la suspensión de 600 trabajadores en su planta de General Pacheco por 30 días.
'En principio iban a ser 400 despidos, pero logramos un acuerdo para que se transformen en suspensiones por nueve meses y achicar esa cifra a 350 trabajadores', dijo Barros, y precisó que recién la semana que viene habrá novedades concretas sobre la modalidad de la medida, fundamentalmente los aspectos vinculados con el cobro de los salarios.
La empresa, que hoy emplea a 2.300 trabajadores, pretendía un recorte salarial en etapas para los suspendidos. Según trascendió pretendía abonar el 85 por ciento de los sueldos durante los primeros tres meses, el 65 por ciento, los tres meses siguientes y finalmente un 55 por ciento.
Al respecto, Barros evitó dar precisiones y sólo argumentó que la exigencia del gremio es que en la primera etapa 'no sea menor al 80 por ciento del sueldo de bolsillo'. Al resto de los términos 'los estamos discutiendo en reuniones, pero todavía no hemos cerrado nada porque estamos viendo qué podemos solucionar para que la gente no sea despedida', dijo ayer el titular de Smata Rosario aunque no descartó que más adelante la automotriz abra un proceso de retiros voluntarios que hasta ahora no está contemplada y que sí fue implementada en otras automotrices, como VW.
'Nuestro objetivo es mantener las fuentes de trabajo. El Classic y el Agile no se fabrican más desde el año pasado: de 17 (autos por hora) se fue a 15 gracias al nuevo auto que se fabrica, que es el Cruze II. Si bajaba a 13, quedaba un solo turno y nosotros luchamos para que al menos queden dos', detalló Barros, y agregó que la situación se agrava porque 'dependemos de Brasil, y cayó la exportación a ese mercado'.
La Capital