Las inundaciones son cada vez graves
30/04/17 10:54 | Zonales
El incremento y el diseño adecuado de los espacios verdes públicos urbanos reducen los niveles de riesgo hídrico y permitirían economizar el gasto público en infraestructura, según una investigación realizada por científicos de la cátedra de hidráulica de la Facultad de Ciencias Exactas, Ingeniería y Agrimensura de la UNR.
Según detalló el investigador del Conicet, Eric Zimmerman, responsable de un equipo de trabajo que recopiló datos sobre cuatro cuencas de inundación de la zona (la del Ludueña, la del Saladillo, la del Ibarlucea y la del emisario 10) si se lleva adelante un plan de uso del suelo 'verde' que contemple la no urbanización en zonas específicas e impulse una forma de construcción sustentable se puede reducir hasta un 30 por ciento el riesgo de inundaciones urbanas.
Pero además, este buen diseño urbano permitiría un significativo ahorro para las arcas públicas: 'Hicimos un estudio económico en la cuenca del emisario 10 usando modelos sofisticados y concluimos que el gasto que significa reparar daños por inundación respecto al gasto que necesita un plan «verde» es 10 veces mayor', argumentó el experto, quien agregó que esto puede encaminarse con ordenanzas que regulen el uso del suelo y controles posteriores.
Zimmerman destacó la importancia de la planificación y la gestión por sobre las obras como solución a los problemas hídricos de la zona: 'La infraestructura de drenaje se duplica cada 20 años y aún así no alcanza', ilustró.
'Si no hay instrumentos legales para llevar adelante estas políticas estos problemas no se resuelven. Si se deja librado al mercado inmobiliario la planificación del uso del suelo esto no se va a resolver, tiene que haber una intervención del Estado', dijo el ingeniero especializado en hidráulica, para quien entre el conocimiento científico y el mundo de las decisiones políticas existe un puente de incomunicación 'que a veces es demasiado extenso'.
El trabajo que Zimmerman llevó adelante junto a otros investigadores como Laura Bracalenti se basa en una elaboración de escenarios futuros de posibles inundaciones según la pauta de urbanización elegida.
En un escenario 'neutro' donde se respeten las zonas no urbanizables pero se siga construyendo igual que ahora el riesgo de inundación se duplica para los próximos años, mientras que en un escenario más pesimista donde además se ocupen las zonas no urbanizables ese riesgo se incrementa por cuatro.
'La mejor alternativa es cambiar el uso del suelo e ir hacia un escenario sustentable que incluya obras como techos y veredas verdes, el respeto de las zonas inundables y cambios en el sistema de drenaje' opinó Zimmerman.
E insistió en que los cambios en el uso del suelo urbano y rural en las dos últimas décadas fueron enormes. 'Lo que está en juego es el modelo productivo. Nosotros hacemos monitoreo del Ludueña desde finales de los 60 y el impacto de la lluvia hoy respecto de hace 50 años es mucho más fuerte, por la modificación del uso del suelo'
La Capital