Ceremonia histórica
17/11/19 11:01 | Locales
El arzobispo Eduardo Martin presidio la histórica ceremonia realizada ayer en la iglesia San José, previo a la dedicación del templo y consagración del altar, expuso: “Aquí dedicamos un edificio y lo dedicamos al culto, solo para Dios en el sentido de que ahora esta casa, con la unción del santo crisma en sus paredes, es solo para las cosas del Señor. Y el altar, que es el centro del templo, queda consagrado al Señor, dedicación de la mesa del banquete eucarístico. Para que todo aquí nos invite a la oración, como dice la sagrada escritura, el templo es la casa de Dios y la puerta del cielo, es donde nos encontramos con Él y se nos abren las puertas del cielo”.
“El templo es un lugar al que entramos con respeto porque entramos a un lugar sagrado, dedicado a Dios, entramos a un lugar que nos invita al recogimiento, a la interioridad, al silencio, ese es el sentido. Pero también es la casa de la comunidad, de los hijos de Dios, donde nos reunimos en asamblea y nos encontramos para alabar al señor, para rendirle culto y también el lugar donde recibimos los sacramentos. Ungido el templo es signo de Cristo porque Cristo es el ungido de Dios”.
Andrés Vallasciani