Captura de pantalla de la cobertura de Claudio Ferreyra
18/05/20 16:37 | Locales
En el peaje de General Lagos, situado en la ruta 9 o autopista, en donde se realizan controles exhaustivos, tanto de temperatura como de la documentación pertinente, y todo lo que puede llegar a ser necesario. Hay en todo esto una salvedad: una cola interminable, porque se controla a uno por uno, desde un operativo dispuesto por la Dirección Provincial de Seguridad Vial.
Una cantidad espectacular de vehículos, y la policía vial trabajando a pleno, desviando transporte de carga pesado. Lo que se espera es que las personas que pasen los controles estén en condiciones, y en caso de encontrar a alguien con temperatura, se aplica un protocolo de trabajo, que hace que venga la ambulancia y demás. Aparentemente no se encontró a nadie en estas condiciones, y se realizaron los controles individuales a una multitud.
Una de las personas que estaba en la cola, expresó que hacía aproximadamente una hora y media que estaba varado, avanzando a paso de tortuga. Algunos no estaban ni siquiera enterados de la situación, y al llegar, se encontraron con semejante congestión.
Otra mujer, por ejemplo, se mostró realmente indignada, porque tenía un turno médico y directamente lo perdió. Ella opinó que tal vez los controles podían haberse realizado de una forma más dinámica: “Vengo de San Nicolás, y espero que nos den otro turno, Si esto sale en vivo, esperemos que pueda solucionarlo”.
Está claro que si bien los controles están muy bien realizados, porque sistemáticamente se ha controlado a cada persona, una por una, también es verdad que parece que la cuarentena se relajó demasiado, hasta el punto de parecer como si la pandemia hubiese terminado, a juzgar por la exagerada cola.
Agradecemos a Claudio Ferreyra por la gentileza al compartir esta cobertura realizada para Arroyo al Día.
Andrés Vallasciani