30/11/20 20:44 | Locales
El calvario de Telma Alegre no termina. Viene luchando desde hace diez meses con dos enfermedades: una es la física, con la que combate desde hace años, y la otra es la burocracia y la ineptitud de parte de las instituciones, y más específicamente, del P.A.M.I, que, como es ya de público conocimiento, a veces son tan lentos y densos, que parece que se están burlando de la gente que apostó a ellos aportando con su trabajo cada día de su vida.
Telma comenzó necesitando unas bolsas de colostomia especiales, que son las que vienen con aros, porque las comunes le generaban un fuerte ardor y alergias, por el hecho de tener que pegarlas y despegarlas. Pero ahora, según manifiesta, puede utilizar cualquiera de las dos. El problema surge cuando el director del Pami de la agencia de Arroyo Seco, Julián Polinesi, le notificó que “debía presentar una nota redactada por su médico o médica de cabecera, justificando por qué debía usar esas bolsas, y no las otras, y que ponga y adjunte una foto que indique que es una persona afiliada con tratamiento de oncología”.
Aquí es cuando Telma expone su dramática situación: “No me solucionaron nada. Ahora me están pidiendo otro papel médico, después de diez meses. Últimamente uso las bolsas comunes. Me tienen podrida con todas las cosas que me hacen hacer. Siempre vivo en el médico, y el otro día casi me mata con los medicamentos la doctora. Estoy cansada. Ese día casi me matan, porque me ponen medicamentos de más. Ahora cualquier bolsa me viene bien, pero necesito por favor que me manden alguna. Hace diez meses, y recién ahora me piden que relate por qué uso esta bolsa. Usaba las especiales que tienen aros, porque pegar y despegar hacía que me duela horrores y me causaban una reacción alérgica, e iba más seguido de cuerpo. Mándeme cualquiera, se los suplico. Estoy harta de hacer papeles y trámites y no me mandan nada. No hago más nada. Si me los quieren mandar, que me los manden”.
Uno se pregunta qué han hecho durante tanto tiempo, si bien ya le habían confirmado que las bolsitas estaban listas, porque los papeles estaban en orden: “¿Qué hacen? ¿Nada? Hay que ir a hacer lío a algún canal para que te escuchen. ¿Qué es lo que pasa? No hicieron nada, porque ya me habían pedido muchos papeles y justificaciones, y pasaron diez meses. Me agarraron para la joda. Me decían que me fije en el correo, y nada. Me dieron un número para retirarlo, y no llegaban. Estuve hasta ayer llamando al correo, porque ya estaban encargada. Era todo una joda. Me estaban cargando”
Por diez meses justificando todo con papeles, yendo al médico casi todos los días, gastando fortunas en medicamentos, y ahora ellos pidiéndole cosas que ya presentó, como si todo tuviese que volver a hacerlo, y los diez meses se los hubiese tragado algo y no hubiesen existido. ¿Se levantaron de una larga siesta? ¿o es alguna burla Argentina?
Andres Vallasciani