City Center Rosario
17/10/14 11:16 | Zonales
City Center fue el tercer casino en abrir las puertas en la provincia de Santa Fe. Es el más grande de América Latina con 4.320 metros cuadrados de superficie cubierta. Quienes estuvieron alguna vez en Las Vegas dicen que no hay nada que envidiarle a los gigantes de allá. Con 2.900 tragamonedas, 80 mesas de juego, poker room y bingo, el imponente edificio sobresale entre la humilde barriada de techos bajos que circunda a los terrenos de Balcarce y Batlle y Ordóñez, sector de la ciudad en el que los cambios fueron más visibles.
Cuando el 15 de octubre de 2009 la bola rodó y marcó negro el 22, algo cambiaría para siempre en Rosario. No solo porque se estaba quebrando una larga historia de negaciones a este tipo de emprendimientos, sino porque esa bomba que estalló en el extremo sur de la ciudad iba a dispersar sus esquirlas en la economía, la salud y la vida cotidiana de los rosarinos.
Oficialmente, las obras públicas para la zona sur que Casino Rosario SA se vio obligada a realizar en concepto de compensación, conforme al convenio urbanístico firmado con la Municipalidad, sumaron un total de 25 millones de pesos. Comprendió la pavimentación de la avenida Batlle y Ordóñez entre bulevar Oroño y Moreno y otras cuadras del barrio. Además, se hicieron obras complementarias como rampas, iluminación y semaforización.
“A nivel infraestructura, la zona mejoró. Hay una nueva central eléctrica acá cerca que fue hecha para el casino y gracias a eso no se nos corta más la luz en verano”, apuntó a 30D un comerciante de avenida Arijón al 2000, para quien también la seguridad mejoró. “Pero el impacto en la actividad comercial en el barrio es cero”, agregó. Este dato es reafirmado por Damián D’Angelo, otro empresario de la zona que cree que la huella en el comercio es negativa. “Antes de que esté el casino, la gente del barrio nos compraba más. Había quienes venían una vez por semana a buscar alguna prenda. Hoy, la plata que les sobra, se la gastan ahí”, relata el comerciante que hace 11 años decidió apostar a la zona sur para instalar su local de indumentaria.
Abran juego
Se calcula extraoficialmente que acceden medio millón de visitantes por mes a City Center. Una cifra que no es menor si se tiene en cuenta que es similar a la registrada en un mes de verano en el Casino de Mar del Plata. 30D no pudo acceder a los datos oficiales porque la empresa se negó a responder la solicitud de información y el Municipio se escuda en decir que forma parte del “secreto fiscal”.
Cuando faltaban días para la puesta en marcha de City Center, sus directivos aseguraban: “Nosotros competimos con el Conrad de Punta del Este y no con el de Victoria”, con la intención de retener el dinero que los apostadores porteños dejan en Uruguay. Poco de eso ocurrió. Según encuestas que el equipo de trabajo del diputado nacional Fabián Peralta realizó, el 50 por ciento de los vecinos de la zona sur consultados manifestaron ir al casino con asiduidad. También lo reflejan las palabras de un comerciante de la calle Arijón que habló con 30D: “Mi empleada nunca llega a fin de mes con el sueldo porque se lo juega. Y lo mismo hace su mamá”. Ambas son vecinas de la casa de juegos, y eligen el escolaso para ver “si se pueden salvar”.
No son pocos los que relatan que se ve entrar a las amas de casas con bolsas de supermercado en la mano a realizar sus apuestas. En estos días, el diputado provincial Ariel Bermúdez denunció que “por cada compra en distintos supermercados locales, se otorga un vale por 50 pesos para apostar en el casino. Para nosotros esto incentivar la ludopatía lo que está penado por la ley actual”.
Jugar con los pobres
“Se trata de hacerles jugar el mayor tiempo posible. Cuanto más juegan, más pierden. Y al final, nos lo quedamos todo”, dice Robert de Niro, en su papel de Sam Rothstein en la película Casino.
Nada es caprichoso y menos en el mundo de los negocios. Tanto la construcción como la decoración interna están pensadas para que al atravesar la puerta, la desconexión con el mundo exterior sea total y crear la sensación que allí dentro el tiempo no pasa. Rosario destinó los terrenos del acceso sur para la instalación del mega emprendimiento de Cristóbal López a sabiendas de que tenía ahí mismo un mercado cautivo.
La problemática del juego no afecta solo a las clases más bajas. “A medida que los casinos se diseminan en ciudades des-industrializadas, centros turísticos agonizantes y zonas urbanas ásperas, la participación en el juego crece en los grupos de menores ingresos”, sostuvo Bárbara Dafoe Whitehead, directora de Iniciativas para la Sociedad Civil en el Institute For American Values. En el mismo texto señala que “el método de los casinos consiste en inducir a jugadores de bajos ingresos a hacer una gran cantidad de pequeñas apuestas por visita, a visitar el casino varias veces al mes y mantener ese esquema”.
No es Rosario un caso único. Quedó revelado en el libro “El poder del juego” que los bingos que más recaudan en provincia de Buenos Aires son “los que se encuentran en Berazategui, Avellaneda, Lomas del Mirador y San Martín. Hay actualmente 46 bingos en 32 localidades, sobre todo en los lugares más pobres del conurbano”.
Revista 30 Días
