Tapa del libro usado en la cuestionada capacitación docente.

Tapa del libro usado en la cuestionada capacitación docente.

Tildan de bochornoso y discriminatorio un curso de educación sexual

La secretaria general de Amsafé, Sonia Alesso, pidió a la ministra de Educación, Claudia Balagué, que 'respete la ley de educación integral vigente', tras el aval al curso dado por pastores evangélicos.

17/09/13 14:05 | Zonales

La secretaria general de Amsafé provincial pidió a la ministra de Educación de Santa Fe que 'respete la ley de educación integral (ESI) vigente'. El reclamo llegó al enterarse que el Ministerio provincial avaló el dictado de un curso de formación para docentes, otorgándole resolución ministerial. La capacitación fue dictada por pastores evangélicos y tuvo una clara orientación confesional. 'Se trató de un curso sexista, discriminatorio y bochornoso'.

La resolución declara de 'interés educativo' la 'Jornada de capacitación docente en prevención de abuso sexual infantil' que se realizó el 29 y el 30 de agosto pasado. De acuerdo con lo resuelto podían asistir hasta dos docentes por escuelas (públicas y privadas) de cada establecimiento, sin que esto implicara cómputo de inasistencias.

Lo que llamó la atención a más de un maestro que asistió a estas jornadas es que las dictaban José Luis y Silvia Cinalli, pastores de la 'Iglesia de la Ciudad' y autores de varios libros, entre ellos 'Cuentos que no son cuentos' que tal como lo describen en su promoción está 'enteramente ilustrado y dedicado a niños de entre 2 y 9 años. La protagonista principal, la “Abu”, cuenta historias a sus nietos Ariana y Benjamín, y va forjando en ellos convicciones cristianas. Ha sido diseñado además, como un recurso de prevención de abuso sexual infantil. Una herramienta eficaz para la educación integral de los niños'.

Justamente el tema al que convocaba la jornada era la prevención del abuso sexual en la infancia, contenido que está en el Programa de Educación Sexual Integral que ya es ley y rige para toda la Nación y las provincias. Pero lo llamativo es que este curso de formación de docentes que reconoció la provincia contradice totalmente lo que marca la ley (26.150) sobre cómo y qué debe enseñarse por igual en todas las escuelas, no importa si éstas son privadas o públicas, y tienen orientación confesional o no. La ley es la misma para toda la infancia y adolescencia y no debe estar tenida de contenidos religiosos, al menos la que se imparte en las aulas.

Alesso contó que llegaron al gremio las quejas de maestros que se consideraron afectados por el contenido claramente confesional de este curso, avalado por la provincia; que invitaba a dos docentes por escuela a concurrir a formarse en la prevención de un tema de tanta preocupación como es el abuso sexual en los niños y niñas. La sorpresa se la llevaron al advertir el contenido y quiénes lo dictaban.

Por esas razones, Alesso pidió que 'el Ministerio respete la ESI y tanto la ley nacional como la provincial en esta materia'. 'Está conformada por contenidos, ampliamente discutidos y consensuados, aprobados en el Congreso de la Nación, y luego por todas las provincias en el marco del Consejo Federal de Educación', recordó Alesso.

Entonces _continuó_ 'avalar este curso es ir en contra de la ley, sobre todo por su contenido sexista, discriminatorio y bochornoso'.


En el sitio ww.iglesiadelaciudad.com.ar, los pastores José Luis y Silvia Cinalli se presentan y explican su trayectoria. Juan Cinalli es abogado y Silvia médica sexóloga.


También en el portal donde difunden sus libros, ofrecen sus charlas y capacitaciones entre otras definiciones se lee sobre 'Los cristianos y la homofobia': 'Hoy día muchas leyes exigen la no discriminación por razones de género, sexo u orientación sexual. Nos sumamos al avance de los derechos personales. En una sociedad pluralista deben respetarse los derechos de cada integrante de la comunidad, pero no aceptar el comportamiento homosexual como moralmente bueno, no es homofobia, es disensión pluralista. La tolerancia debe ser en ambos sentidos. Convivimos en una sociedad que frente a cada tema tiene distintas posturas, según qué grupo o colectivo se exprese. Los que confesamos a Jesucristo como nuestro Señor, vivimos conforme a lo que dice la Biblia, ese es un derecho personal que debe ser resguardado. No debería existir problema en que expresemos nuestra opinión frente al tema de la homosexualidad. No podemos ver a la homosexualidad como una opción al matrimonio heterosexual, porque la Biblia no lo presenta de esa manera. Nosotros, al igual que cualquier otro grupo, tenemos el derecho de expresar nuestra postura, aunque los grupos pro gay disientan con la misma. Por lo tanto, no tengas ningún temor ni permitas que te tilden de ‘discriminador’ u ‘homofóbico’ cuando digas que no estás de acuerdo con la unión de personas del mismo sexo. Es simplemente una opinión tan válida como la que tienen ellos. Si no podemos decir que, de acuerdo a los principios bíblicos, consentimos solamente en el matrimonio monogámico y heterosexual, estaríamos siendo nosotros mismos los discriminados'.

La Capital

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