Víctimas de la pasión
25/11/15 13:06 | Nacionales
El hecho ocurrió el viernes en Pilar. El enigma aún no fue develado. Tres tiros en el pecho, otros dos disparados al aire y un misterio que mantenían tres personas, de las que ahora sólo viven dos.
María Laura Alayón había sido pareja de Diego Feinmann, el medio hermano del periodista Eduardo Feinmann, y quien actualmente es pareja del joven millonario Gastón Berganza, detenido por el crimen. Entre los tres había un triángulo peligroso que terminó en un asesinato. A la mujer le gusta sacarse fotos sensuales y cuidar de su imagen.
Berganza es amigo de poderosos. Siempre aparecía rodeado de bellas mujeres y es fanático de “los fierros”. Su nombre aparece en los medios relacionado con este asesinato. Un año atrás había sido noticia por comprarle, supuestamente, una Ferrari a Meldorek, la empresa de Sergio Schoklender, inscripta en un pueblo perdido de Neuquén, para evadir impuestos.
Alayón eliminó todos los perfiles de sus cuentas en las redes sociales. Pero se la puede ver en algunas fotografías acompañando, en autos lujosos y salidas románticas, a Berganza.
VIAJES, LUJO Y VELOCIDAD
La rubia mantenía como rutina verse con el empresario y acompañarlo en algunos viajes exóticos por el mundo. Berganza había comprado una pistola automática Glock, calibre 40, por cuestiones de “seguridad” y la portaba en la guantera de su BMW. Según trascendió, Alayón desconocía que el hombre portaba un arma, pero sabía que existía un enojo entre ellos.
Feinmann habría intentado reconquistar a la rubia y eso enfureció al millonario. Incluso, hay versiones que indican que ella lo habría denunciado por acoso en dos oportunidades.
El viernes, el hermano del periodista murió en un episodio que aún está siendo investigado. Su madre aseguró que el empresario lo atacó con un arma: le disparó tres balazos en el pecho y la víctima murió desangrandose, pocos minutos después de la 1 de la madrugada, cuando lo trasladaban al Hospital Sanguinetti de Pilar. “Lo mataron como a un perro”, dijo el periodista Eduardo Feinmann, quien reconoció que no veía a su medio hermano y contó que era hijo de su padre.
UNO