Padre Juan José
24/05/20 19:22 | Locales
El Padre Juan José Capitanelli ofició otra misa de cuarentena, celebrando la fiesta de la ascensión de Jesús.
Compartimos su reflexión: “Celebramos, en este domingo, la fiesta de la ascensión de Jesús. Ya terminando el tiempo pascual, celebramos un acontecimiento muy importante en la vida de Jesús y de la iglesia. El hecho destacado es que Jesús vuelve al padre, para desde allí, enviarnos al Espíritu Santo, que celebraremos en Pentecostés, el próximo domingo. La misión que nos deja es que nos dice que ha recibido todo poder en el cielo y en la tierra. Ha quedado muy claro para la iglesia, para experimentar todo lo que nos ha dicho y nos ha dejado, por sus relatos, y por las señales. Lo que nos deja es para que podamos continuar con su obra, y esto es muy bueno, para mostrar a los hombres al mismo Dios, y demostrar que es Dios todopoderoso, con autoridad sobre todo, cosa que repetimos en la Santa misa, pero que no meditamos. La autoridad que nos da es para que todos podamos compartir el descubrimiento de estos dones que nos da Dios en sus tres personas. Que todos podamos valorar y gozar de todos los bienes y beneficios que por su poder y autoridad nos quiere dar. Sobre todas las cosas, se trata de mostrar un Dios que es misericordia, amor y paciencia. El anuncio es mostrar que hay alguien que nos ayuda a transformar la realidad y la vida de los hombres, siempre para bien, que siempre interviene para que el hombre pueda caminar hacia adelante, ir hacia delante. Esto da una mirada distinta y renueva la esperanza sobre todas las cosas, que se pueden ir renovando por la gracia de Dios”.
El mensaje, recordó el padre, debe ser de palabras y obras, porque cobra fuerza con el testimonio de las obras: “El convencimiento debe ser estar en el camino, del aprendizaje, para llevar a los demás. No se trata de ser perfecto, sino para cada día intentar ser mejor persona en el camino de la santidad”.
Andrés Vallasciani
